Los Buenos Tratos potencian la autonomía personal, la libertad y la felicidad de las personas implicadas en ese empeño. Los malos tratos, lo contrario. Por ello, en las relaciones afectivas y de pareja hay que apostar, sí o sí, por los buenos tratos.
Porque esta forma de tratarnos deja huella en nuestras relaciones afectivas, particularmente en la pareja. Una huella que se multiplica, se expande... Huellas que, a su vez, van "marcando" el camino hacia una sociedad más justa e igualitaria.
Puedes acceder al folleto de la campaña en este enlace.
A continuación te presentamos la stop motion "Los buenos tratos dejan huella", una iniciativa realizada en colaboración con AESEX (Asociaciones para la Educación Sexual).
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